miércoles, 30 de abril de 2008

Lily Brusconi de Chatuo


El no buscaba fanfarria y mucho menos fama. Al fin y al cabo todo termina siendo igual. Conocio una mujer con el deseo en sus ojos, el le dio su amor y ella tomo su nombre. Los tiempos fueron buenos y fueron malos, la mayor parte se encontraron en el medio. Tuvo que tragar una dura pildora por los tiempos que tenian, ella encendio la exhibicion para que todos lo vieran.
Algunos encuentra consuelo en el trabajo o en El Señor, ella se encontraba feliz y absoluta en su sueño, cuando la cruda cal quemo sus ojo, el encontro comodidad en la botella barreta del viejo Jim Beam.
Un dia en su pozo mas profundo, el encontro algo que sentir. Ella ofrecio una suerte de carencia de respeto, por esa razon el se hundio junto a dos barriles de cemento en el agua turbia.
Ella lloro de dia y lloro de noche. Lloraba mas fuerte cuando habia alguien a su lado. Lloro hasta el punto de no saber si lloraba por el o por ella, pero cuando mas cercano se encontraba el lente de la camara, mas grande el sollozo.
La mayoria del publico acentuo que un infierno en vida llevaba ya que publicamente mostraba sus venas abiertas, sin embargo, nunca mas hubo una gentileza para ella, tampoco las grandes rebanadas de la fortuna y fama.
Ahora en la cola del sobre-todo de un hombre muerto ella viaja alto.

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